Un buen disfraz pasará a la historia como tal si un buen fotógrafo sabe retratarlo. En víspera de Halloween, queremos ayudaros a planificar una sesión de fotos terrorífica para que vuestros disfraces, ya de por sí aterradores, hagan temblar a los mismísimos álbumes digitalesen los que los guardéis para el recuerdo.
Para ello nos vamos a inspirarnos en el trabajo de Julie Peveto una fotógrafa americana que utiliza a su marido y su hija como modelos, y cuyas imágenes tienen un aura verdaderamente fantasmagórica.
La familia hace una espeluznantesesión de fotostodos los años con sus disfraces de Halloween y para el atrezzo utilizan cosas tan sencillas como harina o pintura blanca.
Las localizaciones, los trajes de época y el maquillaje son también un complemento importante. En las fotografías de la familia de Julie, por ejemplo, siempre hay algún cementerio.
Otros elementos como los candelabros o una luna llena bien colocada pueden dar a vuestras fotografías un toque extra de misterio.
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A nivel técnico las exposiciones de la cámara dual y la utilización de la obturación lenta son dos herramientas muy socorridas en estas sesiones.
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Fuente: Bored Panda
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