Una de las técnicas más utilizadas en fotografía es el contraluz. El contraluz es una de esas formulas que siempre funcionan y cuyos resultados son en general impresionantes. Vamos a daros unos cuantos consejos de uso enfocados al retrato y en capitulos posteriores iremos compartiendo con vosotros más secretos de está forma de fotografíar.
Un contraluz como su nombre indica es una imagen que está tomada con el sujeto situado al contrario de la luz, está por tanto oscurecido. Es posible que incluso a veces a simple vista nos cueste ver correctamente al sujeto a fotografiar.
Para fotografiar de forma correcta un contraluz debemos sobreexponer (es decir dar más luz de la que es necesaria). Lo normal es que con dos puntos más de luz la imagen ya esté correctamente sobreexpuesta aunque esto no siempre funcionara, y si tenemos la posibilidad porque estamos realizando la fotografía con digital, lo ideal es hacer varias pruebas hasta poder encontrar el punto de luz que más nos gusta.
Los contraluces es una técnica que embellece y estiliza. Los rasgos de las personas retratadas a contraluz se dulcifican, las arrugas e imperfecciones de la piel se disimulan, lo que hace de esta técnica una infalible a la hora de realizar retratos efectivistas y rápidos.
No olvidemos que hay muchos tipos de contraluz y no siempre nos interesará realizar la fotografía con luz muy directa: en ocasiones simplemente preferiremos que simplemente haya algo más de luz que en el sitio donde esté el retratado.
Con la luz directa, podemos jugar con el flare, una deformación de la imagen con resultados de ensueño, este efecto encaja muy bien en celebraciones como por ejemplo bodas, por ese aire romántico que parece darle a la imagen.
No nos olvidemos del flash: un contraluz con flash nos dará como resultado una imagen divertida y potente, con colores vivos y una imagen plana con mucha personalidad. Si usamos la cámara en modo automático el flash de nuestra cámara se disparara con este efecto casi de forma segura.
Aunque a veces nos interesa que el sujeto se vea de forma definida, también podemos jugar en los contraluces con un elemento muy importante en la fotografía: las siluetas. Un buen contraluz nos dará una silueta oscura, definida y con una gran carga compositiva.
Sino disponemos de parasol para nuestra cámara (qué es una tapita que se coloca alrededor del objetivo para evitar que entre luz en la foto que no queremos) podemos usar nuestra propia mano: pruébalo. Coge tu cámara e intenta fotografiar algo que este a contraluz con luz directa, si tapas el objetivo con la mano verás como la luz va cambiando. Unas veces nos interesará dejar esta luz infiltrada en la imagen, y otras podremos tomar la decisión de que lo mejor es tamizarla.
Y un último consejo, aprovecha las cortinas y persianas, ya que son un fiel aliado de los contraluces. Utilizalas siempre que puedas para evitar la luz solar directa.
