Después de los interesantes consejos que os hemos dado sobre como convertir un simple flash de mano en un foco de estudio vamos a ir con la segunda parte de estos trucos casero s para sacarle todo el partido posible a los elementos de los que dispones, o si no al menos de conseguir geniales resultados con muy poco presupuesto.
Vamos a hablaros de algo muy utilizado por los profesionales en los estudios y que sirve para realizar imágenes con una iluminación sublime. Para ello antes vamos a hablar de los tipos de luz que tenemos en la fotografía, o al menos de algunos de los tipos que existen.
Por un lado tenemos la luz directa, es aquella que incide de forma directa (valga la redundancia) sobre el objeto que vamos a fotografiar. No hay rebotes ni la luz se esparce por ningún sitio. Esta luz puede ser continua, como la que daría una lamparita de noche, o de flash, que proporciona un destello puntual. Esta última es en general más potente que la continua aunque actualmente existen en el mercado focos muy potentes que imitan de forma muy fiable esta iluminación.
Luego tenemos la luz difusa, que es aquella que obtenemos cuando interponemos un elemento translúcido entre el objeto a fotografiar, como por ejemplo, una tela de nylon para que la luz traspase este tejido y de un aspecto especial a la fotografía final. Por ejemplo si estamos haciendo una foto en exteriores y la luz se filtra a través de las nubes, tendremos una luz difusa.Luz indirecta o rebotada, es aquella que antes de llegar al objeto rebota en otra superficie. Esto ocurre por ejemplo si estamos usando el flash para fotografiar una escena y lo rebotamos en un techo, de este modo la luz se dispersa y no da directamente al sujeto. El sitio donde rebote cambiará el tono de la fotografía: no es lo mismo rebotarlo en una superficie blanca que en, por ejemplo, un carton recubierto de papel de plata.
El truco del que vamos a hablar hoy tiene que ver con la luz rebotada: os vamos a enseñar a hacer una cajita de luz. Una caja de luz puede ser desde una habitación pintada por todas partes de blanco hasta una hecha a medida.
Imaginad que estamos fotogrfiando en nuestra casa a una modelo ¿como mejorar la iluminación si no disponemos de grandes recursos? Pues bien, la respuesta es el polyespan. El Polyespan es un corcho que podemos adquirir en papelerías a un precio muy económico, o bien si tenemos la posibilidad, podremos encontrarlo en los contenedores de reciclaje de los polígonos industriales.
Solo tenemos que hacer ?una habitación? con estas paredes de polyespan alrededor de lo que queramos fotografiar para obtener a través de la luz rebotada una iluminación sublime, que logrará eliminar las sombras y conseguir una iluminación uniforme, suave y equilibrada. Si no tenéis polyespan. unas cartulinas blancas servirán ¿y por qué no las forráis con papel de envolver regalos dorado? El resultado puede ser impresionante ¡animaros a probar!
Hasta pronto!!!
Vamos a hablaros de algo muy utilizado por los profesionales en los estudios y que sirve para realizar imágenes con una iluminación sublime. Para ello antes vamos a hablar de los tipos de luz que tenemos en la fotografía, o al menos de algunos de los tipos que existen.
Por un lado tenemos la luz directa, es aquella que incide de forma directa (valga la redundancia) sobre el objeto que vamos a fotografiar. No hay rebotes ni la luz se esparce por ningún sitio. Esta luz puede ser continua, como la que daría una lamparita de noche, o de flash, que proporciona un destello puntual. Esta última es en general más potente que la continua aunque actualmente existen en el mercado focos muy potentes que imitan de forma muy fiable esta iluminación.
Luego tenemos la luz difusa, que es aquella que obtenemos cuando interponemos un elemento translúcido entre el objeto a fotografiar, como por ejemplo, una tela de nylon para que la luz traspase este tejido y de un aspecto especial a la fotografía final. Por ejemplo si estamos haciendo una foto en exteriores y la luz se filtra a través de las nubes, tendremos una luz difusa.Luz indirecta o rebotada, es aquella que antes de llegar al objeto rebota en otra superficie. Esto ocurre por ejemplo si estamos usando el flash para fotografiar una escena y lo rebotamos en un techo, de este modo la luz se dispersa y no da directamente al sujeto. El sitio donde rebote cambiará el tono de la fotografía: no es lo mismo rebotarlo en una superficie blanca que en, por ejemplo, un carton recubierto de papel de plata.
El truco del que vamos a hablar hoy tiene que ver con la luz rebotada: os vamos a enseñar a hacer una cajita de luz. Una caja de luz puede ser desde una habitación pintada por todas partes de blanco hasta una hecha a medida.
Imaginad que estamos fotogrfiando en nuestra casa a una modelo ¿como mejorar la iluminación si no disponemos de grandes recursos? Pues bien, la respuesta es el polyespan. El Polyespan es un corcho que podemos adquirir en papelerías a un precio muy económico, o bien si tenemos la posibilidad, podremos encontrarlo en los contenedores de reciclaje de los polígonos industriales.
Solo tenemos que hacer ?una habitación? con estas paredes de polyespan alrededor de lo que queramos fotografiar para obtener a través de la luz rebotada una iluminación sublime, que logrará eliminar las sombras y conseguir una iluminación uniforme, suave y equilibrada. Si no tenéis polyespan. unas cartulinas blancas servirán ¿y por qué no las forráis con papel de envolver regalos dorado? El resultado puede ser impresionante ¡animaros a probar!
Hasta pronto!!!
